
MyInvestor ha entrado con fuerza en el panorama financiero español con una oferta competitiva en fondos de inversión, hipotecas y planes de pensiones. Ha pasado de tener 16.000 clientes a más 40.000 en menos de un año, al tiempo que ha cuadruplicado su cifra de negocio. Cerró 2019 con 200 millones y prevé terminar 2020 con 800 millones de euros.
“Nuestra misión es ayudar a nuestros clientes a gestionar su patrimonio y crecer con ellos. Democratizamos las inversiones comercializando productos de inversión que tradicionalmente estaban al alcance de una minoría”, explica Unai Beato, Chief Data Officer de MyInvestor. El directivo asegura “Nuestro éxito reside en que somos una alternativa real a la banca tradicional. Ofrecemos toda la gama de servicios bancarios –cuentas, hipotecas, productos de inversión y tarjetas- con una política de comisiones mínimas, máxima transparencia, y ausencia de la letra pequeña y conflicto de interés”.
Firme defensor de una correcta gestión del dato como base del crecimiento del negocio, Unai Beato asegura que “en la banca tradicional el contacto con el cliente se hacía masivamente a través de gestores, que atesoraban el conocimiento de sus clientes. Conceptos como la adecuación al cliente, atención personalizada o confianza recaían antes en estos gestores”. Sin embargo, desde su perspectiva, “esto actualmente no es ni sostenible ni eficiente. Por lo que tenemos que buscar la manera de articularlo a través de sistemas automáticos que permitan recoger ese conocimiento y ofrecer un servicio al cliente rápido y personalizado. Es ahí donde el dato cobra toda su importancia. Pero la cantidad de información que se genera es inmensa; la clave es saber dónde está el dato decisivo de cada cliente y en cómo utilizarlo”, indica.

“En MyInvestor, por ejemplo, comercializamos cientos de fondos de inversión y planes de pensiones de otras gestoras. Es lo que se conoce como arquitectura abierta. ¿Por qué no ver, en algún momento, que un banco vende hipotecas de otro? Los bancos que sean más ágiles adoptando este modelo tendrán una ventaja diferencial. Aquí la tecnología vuelve a ser clave”, asegura el directivo.
Apostamos por Altia "por la confianza que tenemos en su equipo técnico y directivo. Junto a su amplia experiencia con grandes clientes e instituciones del sector financiero. Su profundo conocimiento de la tecnología, su visión de futuro y conocimiento del negocio son un marchamo de calidad. Y los resultados lo avalan”, concluye.